jueves, 16 de abril de 2009

Verificación personal de las ''ideas nuevas''.

Uno de los aspectos que se me hizo notorio, desde los primeros momentos en que tuve acceso a ésta enseñanza, y que me pareció no solo interesante sino muy importante para mis estudios particulares, fué la afirmación y sugerencia de no aceptar como verdaderos, nada que no se verifique o corrobore en la propia experiencia personal. De ésta manera me parece que se evitan, desde un principio, las fantasías, las ilusiones, los planteamientos dogmáticos, las supersticiones, las afirmaciones absolutas que no aceptan opiniones disidentes o cambio alguno. Sobre todo en lo que se refiere al conjunto de temas relacionados con la psicología humana, ésta afirmación está sugerida, solicitada, y propuesta expresamente, en el verificar en el propio estudio personal, en la constatación y en la observación propia, de la validez de los conceptos e ideas que se proponen. Otra de las cuestiones que es muy importante tomar en cuenta desde un principio, es sobre las palabras y los conceptos que pretenden significar dichas palabras, utilizadas dentro del contexto de ésta enseñanza. De manera directa podemos afirmar que en ésta enseñanza se pretende utilizar un nuevo lenguaje, un nuevo código, un sistema de signos que nos van a servir para ser más precisos en nuestras comunicaciones entre los estudiosos de esta disciplina. Poco a poco, a lo largo de estas entregas, vamos a ir aprendiendo éste nuevo lenguaje. También es cierto que entre los temas que se tratan , dentro del esquema del llamado Cuarto Camino, pueden encontrarse semejanzas y aún coincidencias con otros planteamientos de otras disciplinas o doctrinas que pretende estudiar al humano y su posible desarrollo o evolución. A éste respecto, me parece muy pertinente registrar aquí, lo que uno de los estudiosos de esta disciplina y uno de sus principales expositores, comentaba en relación a la audiencia de sus conferencias, y es lo siguiente: '' Me dí cuenta de que para muchos, la principal dificultad consistía en reconocer que realmente habían oido ''cosas nuevas'', esto es, cosas que antes nunca habían oido. Sin confesárselo, trataban siempre de negar mentalmente la novedad de lo que habían oido y se esforzaban, cualquiera que fuese el tema, por retraducirlo a su lenguaje habitual. Sé que no es facil comprender que se astán oyendo ''cosas nuevas''. Estamos tan acostumbrados a las viejas canciones, a los viejos estribillos, que hace ya mucho tiempo que hemos dejado de esperar, y hasta de creer, que pueda existir algo nuevo. Y cuando oímos formular ideas nuevas, las tomamos por ideas viejas, o pensamos que pueden ser explicadas e interpretadas por las ideas viejas. En efecto, es árdua la tarea de comprender la posibilidad y la necesidad de ideas verdaderamente nuevas; eso exige tiempo y una revisión de todos los valores corrientes. '' Yo estoy plenamente de acuerdo con lo anteriormente trancrito y además agregeré que en estos terrenos en los que se trata de encontrar y aprovechar sabiduría para mi propio provecho, y para los demás, es imprescindible descubrir que me encuentro en un proceso, y que éste proceso tiene etapas, y que es diferente la etapa de información, en la que acumulo datos, referencias, conocimientos, de la etapa de formación, en la que acepto como valida la información adquirida, y procuro verificarla, y luego aplicarla a mis secuelas y formas de pensar, a mis estilos de sentimiento y de emoción y sobre todo, trato de afectar mi conducta, mis maneras de respuesta a la Vida, y mis propuestas a las circunstancias. Y será entonces, cuando quizas pueda acceder a la etapa de transformación, etapa de la que, al menos yo, no puedo todavía hablar.

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