La Conciencia.

Voy a iniciar en esta ocasion uno de los temas centrales de la ense;;anza del Cuarto Camino; ademas puedo señalar que para mi apreciacion personal, es el tema alrededor del cual se desenvuelve toda esta enseñanza, me estoy refiriendo al tema de La Conciencia. Abarca aspectos muy amplios y variados , pero me parece que una manera de acercarnos, es recordando lo que ya se apunto en una de mis intervenciones previas: que el humano no conoce y que aun no posee, una serie de facultades y poderes que se atribuye, que cree conocer y que pretende poder emplear. Una de esas cualidades y facultades que cree que ya posee en forma plena, es la Conciencia. Esto es de suma importancia, pues mientras creamos que la poseemos y que podemos dominarla, no haremos los esfuerzos requeridos y apropiados para adquirir en forma gradual una mejor comprension y un dominio mas pleno de la Conciencia. De una manera general, podemos conocer cuatro Estados de Conciencia. Estos son: el sue;;o, el estado de vigilia, la conciencia de si, y la conciencia objetiva. Aun teniendo la posibilidad de conocer estos cuatro estados de conciencia, podemos afirmar que no vivimos de hecho, mas que en dos de estos estados: una parte de nuestra vida transcurre en el sueño, y otra parte en lo que se denomina estado de vigilia, aunque en realidad este difiera muy poco del sue;;o; deberia denominarse mas bien, estado de conciencia relativa. Por lo que respecta al tercer estado de conciencia o "conciencia de si", nos lo atribuimos , creemos poseerlo, aunque en realidad no seamos concientes de nosotros mismos sino por chispazos, que son muy raros, y que no los reconocemos, por ignorar lo que en verdad podrian implicar. Podemos decir que cuando se dan esos momentos ocasionales de conciencia de si, nos queda un vivo recuerdo de las circunstancias en medio de las cuales se produjeron, pero carecemos de poder sobre esos momentos. Aparecen y desaparecen, bajo la accion de condiciones exteriores, de asociaciones accidentales o de recuerdos de emociones fuertes y evocadoras. En relacion a la Conciencia Objetiva, en la vida ordinaria, el humano nada sabe y no puede tener ninguna experiencia de este orden, puesto que debemos comprender que hasta los destellos de conciencia objetiva pueden solo tenerse en el estado plenamente realizado de conciencia de si. Cuando hablamos de las funciones del humano, mencionamos que existen siete funciones. Las cinco primeras son: la funcion intelecual, la funcion emocional, la funcion instintiva , la funcion motriz y la funcion sexual. Ademas de estas cinco funciones existen otras dos, para las cuales el lenguaje ordinario no tiene nombre, y que, afirmabamos que aparecen en los estados superiores de conciencia: una, la funcion emocional superior, aparece en el estado de conciencia de si, y la otra, la funcion intelectual superior, aparece en el estado de conciencia objetiva. Como no nos hallamos en esos estados de conciencia, no podemos estudiar esas funciones, ni experimentarlas y conocemos de su existencia de un modo indirecto, por los testimonios de aquellos que han realizado la experiencia de ellas. Esas alusiones son dificiles de comprender, porque no hacen distincion alguna entre los dos estados superiores de conciencia. Lo que se denomina "samadhi", o estados de extasis, o de iluminacion, o de "conciencia cosmica", pueden referirse a uno o al otro estado. Continuare este tema en la siguiente ocasion.