viernes, 24 de abril de 2009
El sentido del Sacrificio.
En ésta entrada voy a iniciar el tratamiento de uno de los temas centrales en éste Trabajo. Pretendo referirme al sentido que adquiere en éste Trabajo la noción de Sacrificio. Investigando un poco he encontrado que, en forma cumún , se considera que el Sacrificio implica el otorgar una ofrenda, generalmente a una divinidad, en señal de adoración, de expiación o de petición. También he encontrado que el Sacrificio también puede significar la renuncia, casi siempre voluntaria, a un bién, o la privación de algo valioso o la obligación que una persona se impone, para beneficiarse a sí mismo, o a alguien y obtener algo, también considerado valioso, en correspondencia. Me llamó la atención esta acepcion de renuncia voluntaria a algo valioso, o hacer algo que no gusta o que implica mucho esfuerzo, para beneficiar a alguien o a sí mismo, y con la esperanza de obtener algo que se desea a cambio. Otra de las partes notables de este tema es la casi unanimidad entre las escuelas llamadas esotéricas y prácticamente en todas las doctrinas religiosas, que, para que se pudiera pensar en alcanzar la transformación y superación humanas, exigen el que se deban efectuar Sacrificios. Parece ser que el Sacrificio es necesario. Que nada se puede conseguir sin Sacrificio. Que es necesario que determinemos que es lo que estamos dispuestos a Sacrificar, para obtener lo que deseamos. Debemos pues, definir con claridad lo que estamos yá preparados a sacrificar y no regatear más sobre éste asunto. Este es el momento en que podemos presentar una de las axigencias más claras y determinantes de éste Trabajo: ''El Humano debe Sacrificar su Sufrimiento''. A éste respecto podemos afirmar que uno de los conceptos que la gente no comprende, es justamente ésta idea de Sacrificio. En general se acepta que se debe Sacrificar algo que se tiene, y en contraste, éste Trabajo afirma que se debe Sacrificar lo que se imagina tener, y que en realidad no se tiene en lo más mínimo. Se debe hacer el Sacrificio de nuestras fantasías. Pero ésto es dificil, es muy dificil; es mucho más facil sacrificar cosa reales. Podemos afirmar con toda certeza, que los humanos renunciarían a cualquier placer, antes que renunciar a su propio sufrimiento. El criterio del humano está hecho de ésta manera. Toda nuestra educación esta cimentada en el ''valor del sacrificio''. Y sobre todo éste Sacrificio debe traer consigo Sufrimiento, o se considera que no es válido. Sin embargo, se afirma tajántemente en éste Trabajo, que es indispensable librarse del Sufrimiento. Es más, quien no esté libre de Sufrimiento, no puede avanzar en el Trabajo. Nada se puede lograr sin Sufrimiento, pero al mismo tiempo, hay que comenzar por Sacrificarlo. Esta aparente paradoja hay que descifrarla por uno mismo.
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