Ley de Tres.

La llamada ''Ley de Tres'', o ''Ley de los Tres Principios'', o ''Ley de las Tres Fuerzas'', es la Ley fundamental a través de la cual se crean todos los fenómenos, en cualquiera que sea la diversidad de los Universos. Según esta Ley, todo fenómeno, en cualquier escala que se mire y en cualquier mundo en que tenga lugar, es el resultado del encuentro de Tres Fuerzas, diferentes entre sí y opuestas entre sí. Una sola Fuerza, o inclusive dos Fuerzas, no pueden jamás producir un fenómeno. Es necesaria la presencia de, sobre todo, de una ''Tercera Fuerza'', porque es únicamente con su asistencia, que las dos primeras Fuerzas pueden producir lo que podemos llamar un fenómeno, o sea la manifestación de una actividad producida en la naturaleza de caracter físico o psíquico. Las dos primeras Fuerzas son reconocidas por el pensamiento contemporáneo y es más, se admite su existencia como necesaria para que se produzca un fenómeno, siempre y en todas partes. Se las identifica como : fuerza activa y fuerza de resistencia, magnetismo positivo y negativo, electricidad positiva y negativa, células masculinas y femeninas, etc.. En cuanto a la Tercera Fuerza, generalmente se desconoce su existencia y la importante participación que tiene en todo acontecimiento. Sin embargo, podemos afirmar que la doctrina de las Tres Fuerzas la podemos encontrar en la raiz de prácticamente todas las culturas y todos los sistemas antiguos. En la doctrina Cristiana, que es la que más conocemos, estas tres fuerzas están expresadas en las Tres Personas de la Trinidad : Padre, Hijo y Espíritu Santo, que crean el Universo; en la Alquímia medioeval, una de las doctrinas occidentales más importantes, todas las cosas existentes eran apreciadas como mezclas variantes de : Sal, Azufre y Mercurio; en la doctrina del Yoga Sankhya, se asignaba un papel creador a las Tres Gunas : Rajas, Tamas y Satva; en el Hinduísmo, estas Fuerzas están personificadas como : Brahama, Shiva y Vishnú; en la cultura China ancestral, encontramos a las Tres Fuerzas en la interacción del Yin y del Yang , bajo la presencia del Tao. En todos los Sistemas y las Doctrinas señaladas, la presencia de las Tres Fuerzas es universal, es decir, se considera que penetran en todo, y que intervienen en todas partes y en toda escala. Sin embargo en la moderna filosofía y en los esquemas modernos de esplicación de la realidad, no existe un planteamiento semejante a las mencionadas Tres Fuerzas. Podemos describirlas como sigue : La Primera Fuerza es de naturaleza Activa , Positiva, o Creadora; La Segunda Fuerza es de naturaleza Pasiva, Negativa o Material; y la Tercera Fuerza es de naturaleza Neutralizante, Mediadora o Formativa. Todos éstos apelativos en realidad solo son maneras de nombrarlas, aunque en realidad las Tres Fuerzas son Activas , unas como las otras, y solamente y únicamente aparecen como Activa, Pasiva o Neutralizante, en su punto de encuentro, en el preciso momento en que entran en relación una con la otra, en el momento en que se produce un fenómeno particular. La presencia de la Tercera Fuerza ha pasado inadvertida, y es dificil apreciarla, observarla y comprenderla, debido a las limitantes de nuestros sentidos, como instrumentos fundamentales de apreciación de la realidad , y además por la particular forma de apreciar la realidad a traves de las categorías de percepción del mundo de los fenómenos, es decir en nuestra sensación de espacio y tiempo resultantes de dichas limitaciones. Solo será cambiando nuestra manera de pensar, y por tanto, nuestra manera de apreciar la realidad, como podremos acercarnos a apreciar la Tercera Fuerza.